Medicina Basada en la Evidencia

Introducción a la MBE – 44 – un planteamiento y una estrategia específica en cada base de datos bibliográfica. Entre otros factores, se ha de tener en cuenta: ■ El objetivo de la búsqueda; pues no se necesita la misma información cuando se pretende tener un pri- mer contacto con un problema, que para escribir un artículo científico o una tesis doctoral. ■ Los aspectos concretos del tema sobre los que se de- sea obtener información. ■ La exhaustividad o precisión deseada en los resulta- dos obtenidos (todo lo publicado sobre el problema o solamente lo más importante). ■ Los conocimientos idiomáticos (para poder leer y en- tender los trabajos recuperados). Vencer a la “infoxicación” es uno de los grandes retos de la búsqueda bibliográfica eficiente Además, si la fuente de consulta dispone de un vocabu- lario controlado de palabras clave o de un tesauro, es aconsejable consultar los términos de este vocabulario bajo los que se encuentran los temas de la búsqueda, pues este procedimiento mejora ostensiblemente la calidad de los resultados obtenidos. En caso contrario, es decir, cuando no existe este vocabulario de palabras clave, deberán tenerse en cuenta todas sus posibles variantes ortográficas (singular, plural, forma sustanti- vada o adjetivada, etc.), así como los sinónimos y los términos más generales y específicos, además de utili- zar términos muy concretos y precisos. La realización de búsquedas bibliográficas en bases de datos con garantías de éxito requiere tener en cuenta determinados aspectos metodológicos y procurar se- guir las etapas que se describen a continuación. ETAPAS EN LA REALIZACIÓN DE UNA BÚSQUEDA BIBLIOGRÁFICA 1. El análisis conceptual Implica llevar a cabo el siguiente proceso: a) Identificar los conceptos sobre los que se desea obte- ner información y los términos que los representan, así como todos sus sinónimos, variantes ortográficas y formas abreviadas, desglosando las posibles siglas y acrónimos. Si la base de datos permite realizar las búsquedas mediante listas de términos autorizados o tesauro, como el Medical Subject Headings (MeSH) de Medline ( http://www.ncbi.nlm.nih.gov/mesh ) o EMTREE de Embase, conviene identificar los términos en este tesauro y determinar si la definición que se ofrece de estos términos y el contexto en el que se aplican se ajusta a nuestras necesidades. b) Identificar las enfermedades con nombre propio (epónimos) para ver si están contempladas como tales en la base de datos o si, por el contrario, se utilizan denominaciones descriptivas. c) Decidir los aspectos que interesan de cada enferme- dad o proceso. Seguramente de cada uno de ellos solo interesarán aspectos concretos, como la etio- logía, manifestaciones clínicas, diagnóstico, preven- ción, tratamiento, marcadores pronósticos, etc. d) Según el objetivo de la búsqueda, decidir si se nece- sita precisión o exhaustividad. Se llevará a cabo una búsqueda exhaustiva (o de alta sensibilidad) cuando se pretende obtener todos los documentos existen- tes sobre un tema, aunque algunos de ellos lo traten de manera superficial. Para realizar estas búsquedas es necesario emplear todos los sinónimos de los términos de búsqueda, realizar truncamientos (que se explicarán más adelante) y ejecutarlas en todos los campos en los que se estructuran los registros bibliográficos, incluido el campo resumen si lo hu- biere. Por el contrario, se realizará una búsqueda precisa (o de alta especificidad) cuando se necesite obtener únicamente los documentos muy relevan- tes existentes sobre el problema, es decir, aquellos que lo traten con profundidad. El incremento en la amplitud de la búsqueda implica una reducción en la precisión y la posible recuperación de una mayor cantidad de artículos irrelevantes, mientras que al intentar mejorar la precisión se corre el peligro de ser tan selectivos que no se identifiquen documen- tos que son relevantes. 2. La elección de la(s) base(s) de datos Los aspectos más importantes a tener en cuenta son los siguientes: a) Ámbito geográfico de cobertura de la base de datos. Las búsquedas en las que interesa una amplia co- bertura internacional, sobre todo de publicaciones en inglés, es aconsejable realizarlas en Medline, fá- cilmente accesible a través de la plataforma Pub- Med, de acceso gratuito, o EMBASE, que requiere suscripción. Otras fuentes alternativas son Science Citation Index y Current Content, accesibles gratui- tamente desde los organismos públicos de inves- tigación a través de la Web of Knowledge. En los últimos años han surgido nuevas propuestas que amplían las anteriores, como Google Scholar (Goo- gle Académico: https://scholar.google.es/ ) y Scopus ( https://www.scopus.com/home.uri ) . La fuente más exhaustiva para obtener la literatura científica es- pañola es la base de datos IBECS, elaborada por el Instituto de Salud Carlos III y MEDES, de la Fun-

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